Reinaldo Echemendía Estrada, un nombre que resuena con fuerza en el panorama cultural cubano celebra medio siglo de una carrera artística prolífica y diversa.

Graduado de la Universidad de las Artes en 1972, Echemendía ha demostrado ser un maestro del clarinete y del saxofón, destacándose no solo como intérprete sino también como productor, arreglista y director de orquestas.

Su habilidad para navegar entre la música folklórica y la clásica lo ha establecido como un virtuoso en su campo, ganándose el respeto y la admiración de colegas y críticos por igual.

La musicóloga Heidy Cepero Recoder y el vicepresidente de la filial camagüeyana de Unión Nacional de Escritores y Artistas de Cuba Armando Pérez Padrón, han elogiado su capacidad para fundamentar la creación artística en la investigación profunda, una cualidad que sorprende y enriquece el gremio cultural.

Arístides Bringes, director general y artístico del Ballet Folklórico de Oriente, lo catalogó como una joya y paradigma para todo cantante, bailarín y músico en la isla.

Echemendía, humilde en su grandeza, se considera un servidor de el pueblo y su país, dedicando su arte a la transmisión de conocimiento y cultura, su legado es un testimonio del arraigo y la tradición, y su aniversario un hito que celebra no solo su trayectoria sino también el rico tapiz cultural de Cuba.

Texto y foto: Idaylen Rodríguez Rodríguez/Radio Cadena Agramonte