Prácticas salvajes de Evelin Queipo
Prácticas salvajes es un poemario exquisito. Su autora Evelin Queipo se vale de la etología (ciencia que estudia el comportamiento animal) y de su capacidad de trasponer realidades contrapuestas para dar luz al desequilibrio emocional de los seres humanos en situaciones límites.
Concibe la prosa poética como forma ideal para describir cuán despiadada es esta jungla a la que llamamos “civilización”, pues la alegría, el amor, la amistad, el erotismo, el dolor y muchos sentimientos cotidianos se afrontan con extrema violencia en un mundo donde todo lo que verdaderamente impresiona está protegido del acceso humano.
Este texto mereció el Premio nacional de poesía José María Heredia en 2020 y fue publicado por Ediciones Caserón de Santiago de Cuba en el 2021. Cuenta con impactantes ilustraciones de cubierta y contracubierta de la autoría de Tahimí Cugat y la cuidadísima edición de Rodolfo Tamayo.
Evelin es la muchacha con turbante, en Santiago de Cuba donde estudió Letras y este marzo fue presentado su poemario ganador en la Feria del Libro.
Evelin es la muchacha con turbante, en Santiago de Cuba donde estudió Letras y este marzo fue presentado su poemario ganador en la Feria del Libro.
Prácticas salvajes es el primer poemario para adultos de esta autora, egresada del centro de formación literaria Onelio Jorge Cardoso y ya reconocida en importantes eventos literarios del país. Mi manía de poeta me tienta a regalarles uno de mis poemas favoritos de este libro:
Cierta vez un hombre leyó estos poemas y enmudeció. La piedad se apoderó de su rostro. A partir de ese instante muchos hombres comenzaron a leer estos versos y enmudecieron. En el fondo cada uno se creyó capaz de cambiar mi realidad, para así cambiar mi poesía. Yo, como es lógico he leído peores textos escritos por los hombres y enmudezco. En el fondo también me creo capaz de cambiar su poesía, pero no su realidad.
He aquí una muestra del desenfado con el que Evelin Queipo desmonta la violencia cotidiana de que se nutre Prácticas salvajes, ojalá nos ayude a evitar la barbarie, y a esforzarnos para cambiar la realidad.
Por Jesús Aismar Zamora Avila /Colaborador