A la memoria y al legado de Vicentina de la Torre y de Gilda Zaldívar dedicó hoy un sencillo pero sentido homenaje el Ballet de Camagüey (BC), la víspera de su aniversario 55.

Fue Vicentina (1926-1995) fundadora de la compañía. Cuentan que de niña admiraba por la ventana la magia de las clases de Gilda (1917-1951), a quien debemos la primera institución danzaria de Camagüey.

Entre los participantes de la peregrinación estaba Marta Labrada Labrada, una señora de 80 años de edad, que fue de las primeras alumnas de Vicentina, desde 1956 hasta 1960. “Ella hizo realidad mi sueño de bailar. No tuve que pagarle un centavo”, contó a Adelante.

Recientemente fue localizada la bóveda donde reposa Gilda, en el tercer tramo de la necrópolis. Su historia será incorporada al sendero de mujeres ilustres del Centro de Interpretación del Cementerio, donde sí está Vicentina, a la vista en el segundo tramo.

La maestra María Herminia Martínez de la Torre, Minita, agradeció en nombre de la familia de Vicenta. Regina Balaguer, directora del BC, lo hizo a la Oficina del Historiador de la Ciudad de Camagüey (OHCC) y a los trabajadores de la necrópolis.

También este miércoles, en el Salón de Protocolo Nicolás Guillén Batista, de la Plaza de la Revolución Mayor Ignacio Agramonte y Loynaz, la compañía y varios trabajadores recibieron la Medalla 25 Aniversario de la OHCC.

El BC ya ensaya para presentar Suite el Cascanueces, coreografía de Norbe Risco, 2 y 4 de diciembre en el Teatro Principal; mientras que el día 3 apreciará en ese escenario a sus colegas del Ballet Contemporáneo y del Ballet Folklórico.

Por Yanetsy León González/Adelante

Foto: De la autora