Gracias a la música, de vuelta en casa
Hace 18 años la Ciudad de los Tinajones regaló por primera vez sus encantos coloniales al director de Orquesta y violinista mexicano Armando Vargas Guevara, quien regresa en esta oportunidad para afianzar los lazos de hermandad creados a través de la música entre el país azteca y Cuba.
“Hacía mucho que no estaba en Camagüey, a lo que yo le llamo estar en casa, y realmente reencontrarme con amigos que en mis primeras visitas eran jóvenes de unos 15 o 16 años, como es el caso del maestro Eduardo Campo y verlo ya consolidado como músico, incuso como director, para mí es una gran alegría”, dijo Vargas Guevara.
El Teatro Avellaneda fue testigo de la conversación tras finalizar el concierto junto a la Orquesta Sinfónica de Camagüey, con temas como Lindas Hidalguenses, de Abundio Martínez; la séptima sinfonía de Ludwing Van Beethoven en La Mayor o el Vals Lupita, este último, creación del artista y político mexicano Emeterio Moreno Magos.
“El reencuentro en lo personal me llena de gran satisfacción y en lo profesional me retroalimenta, la experiencia con la orquesta camagüeyana es muy reconfortante, demandó mucho trabajo, pero contentos pues los resultados fueron audibles –añadió el carismático violinista– solo tuvimos una semana de ensayos de manera presencial, pero ya los maestros aquí venían abordado el programa que no era sencillo”.
En compañía de la violonchestista Alondra Barquera y el pianista Roberto Aguilar, provenientes de la nación mexicana, así como de la violinista agramontina Yeleneis Archival la velada conquistó la aprobación del público que regaló varias ovaciones en pie a los artistas liderados por Armando Vargas, quien confesó: “momentos como estos hacen valer la pena los obstáculos que te ponga la vida”.
De igual forma, agregó, “hay que romper los protocolos, nosotros nos atrevemos a interpretar nuestros programas, pero hay que romper el tabú de que la música clásica es elitista, que pueda llegar a ser muy académica, no, la música es para disfrutarse, el arte en general es para eso y así como lo recibes, así agradécelo”.
Planes de regresar en los próximos meses y continuar trabajando junto a la Orquesta Sinfónica de Camagüey con nuevos proyectos devolverán a estas llanuras al músico mexicano Armando Vargas Guevara, quien ya tomó agua de tinajón para estar muy pronto otra vez “en casa”.
Por Claudia Artiles Díaz/ Colaboradora
Fotos: De la autora