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domingo, septiembre 08, 2024

El friki proyecta una ciudad resiliente

Si nunca has hablado con Humberto Delgado Fernández, no lo juzgues por los dreadlocks. Es el arquitecto principal del renovado parque del Teatro Principal y del proyecto de peatonalización de la calle Independencia, del que pudo ejecutar a la par de aquel solo el parque Coppelia. Egresó de la Universidad de Camagüey con una propuesta de restauración de la logia de los Caballeros de la Luz localizada en la Avenida de los Mártires. Lamentablemente, dijo, los proyectos de tesis casi nunca llegan a realizarse. Esperemos que este sí.

Ya es incapaz de montar patineta ni en el parque Agramonte ni en otro, porque puede lastimar a alguien y dañar el patrimonio. Cuando tiene tiempo, toma la tabla para andar por un barrio de amplias vías como Garrido. Tampoco desiste de lograr la aprobación de un proyecto de pista para el skateboarding. Si los skaters tuvieran un espacio tal vez se evitaran perjuicios al ornato público.

Además, Humberto toca la guitarra acústica en la banda Desbroce. Subió a escena durante el XX Festival de Rock Sonidos de la Ciudad, desarrollado por Asociación Hermanos Saíz de Camagüey del 30 de mayo al 1ro de junio.

CARRERA Y PROYECCIÓN

Aunque es joven, ya deja una marca en el panorama arquitectónico de Camagüey. Su participación clave en la remodelación de la plazuela del Teatro Principal fue crucial para realzar un espacio tan emblemático de la ciudad. Desde la rehabilitación de la escultura de Aisar Jalil hasta la integración de elementos modernos que respetan la historia y el patrimonio.

El trabajo se extiende a proyectos como el parque Coppelia y la peatonalización de la calle Independencia, ambos desafíos que ha abordado con creatividad y un profundo respeto por el entorno urbano. La conexión entre la formación académica y la sensibilidad hacia el patrimonio cultural ha sido evidente.

El parque Coppelia representa un hito significativo en su carrera como arquitecto. Situado en el corazón de Camagüey, este proyecto no solo ha revitalizado un espacio público crucial, sino que contribuye a la vida cultural y social de la ciudad. Con un enfoque en la accesibilidad y la estética, el parque ahora sirve como punto de encuentro para los residentes y visitantes, ofrece áreas verdes, instalaciones recreativas y espacios para eventos comunitarios.

—¿Cuál ha sido tu enfoque en estos proyectos para Camagüey?

—Cada proyecto es una oportunidad de devolverle algo a mi ciudad. El parque Coppelia, por ejemplo, es un espacio icónico que han visto muchas generaciones. Quisimos preservar su esencia mientras mejoramos su funcionalidad para la comunidad. Es como un acto de equilibrio entre lo histórico y lo contemporáneo.

—¿Cómo te preparaste para asumir estos desafíos tan complejos?

—Mi formación en la Universidad de Camagüey fue crucial, aunque la realidad profesional supera cualquier teoría. Me ha llevado a aprender sobre la marcha, adaptándome a las necesidades del proyecto y a las expectativas de la comunidad. Además, la influencia de la UNESCO en el centro histórico de Camagüey nos obliga a ser meticulosos en cada intervención.

EL MÚSICO EN EL ARQUITECTO

Pero Humberto no solo se define por sus logros arquitectónicos. Como músico empírico, ha encontrado en el rock una vía para expresar su creatividad y pasión. Cofundador y guitarrista de la banda local Desbroce, ha navegado entre notas musicales y planos arquitectónicos con igual destreza. Su enfoque multidisciplinario se refleja en cómo integra la estética y la estructura, tanto en sus composiciones musicales como en sus diseños urbanos.

Ha tocado en varias bandas locales, ha explorado géneros que van desde el rock alternativo hasta el jazz. Esta faceta enriquece su perfil personal e influye en su enfoque creativo como arquitecto, porque busca integrar elementos culturales y sociales en sus diseños urbanos.

—¿Cómo ha influido la música en tu trabajo como arquitecto?

—La música y la arquitectura comparten esa capacidad de crear emociones y experiencias. Mi experiencia musical me ha enseñado a valorar la armonía y el ritmo en el diseño urbano. Por ejemplo, en el Teatro Principal, traté de captar esa majestuosidad que inspira el arte escénico y llevarla a la plazuela remodelada.

PERSPECTIVAS CON CAMAGÜEY

Mirando hacia el futuro, Humberto espera seguir contribuyendo al desarrollo cultural y arquitectónico de Camagüey. Su visión incluye proyectos que no solo realcen la estética de la ciudad, sino que también promuevan la inclusión y la sostenibilidad. “La ciudad tiene un alma viva”, dice con convicción. “Mi objetivo es preservar su historia mientras la preparo para el futuro”.

—¿Cuál es la ciudad que tú estás tratando de proyectar?

—Me gustaría proyectar una ciudad resiliente, capaz de enfrentar los desafíos contemporáneos con adaptabilidad y fortaleza. Pero también una ciudad culta, que promueva la convivencia y la cultura entre las personas.

—¿Y tus expectativas como arquitecto?

—Espero seguir contribuyendo al crecimiento sostenible de la ciudad. Quiero ver más espacios públicos inclusivos y accesibles para todos los camagüeyanos.

Humberto Delgado Fernández no es solo un arquitecto visionario, sino también un músico y un ciudadano comprometido desde su habilidad para crear espacios que no solo embellecen, sino que fortalezcan la identidad cultural de Camagüey.

Por Yanetsy León González/Adelante

Foto: Humberto Delgado